Yo soy Charlie

Todos somos Charlie. Todos cuantos creemos en la libertad de expresión somos Charlie. Esa libertad de expresión ausente donde impera el terror y el hombre pierde su condición humana. No hay palabras para definir tanta crueldad, tanta barbarie, tanto odio. Tal vez solo hay imágenes, dibujos, viñetas. 
El humor sobrevive al integrismo, la libertad al fanatismo.